La vuelta a la rutina es un momento de estrés para toda la familia. Para los niños supone un periodo de conflicto importante, ya que se suman el estrés de abandonar la libertad de las vacaciones con el estrés de regresar al día a día en casa y, además, la vuelta al colegio. En este artículo te damos consejos para una feliz vuelta a la rutina para toda la familia.
Lo último en lo que queremos pensar cuando nos vamos de vacaciones es en volver a la rutina, pero planificar el regreso con antelación puede hacer que la transición a la vida cotidiana sea mucho más suave y feliz, especialmente para los más pequeños. Diversos estudios confirman que la vuelta al cole es uno de los periodos del año que más estrés causa en los niños, ya que se suman el estrés de abandonar la libertad de las vacaciones con el regreso al día a día en casa y, además, la vuelta al colegio. En este artículo te damos consejos para una feliz vuelta a la rutina para toda la familia.
Consejos para volver a la rutina
Planifica la vuelta… Antes de marcharte
Este consejo tal vez llegue tarde si ya has disfrutado de tus vacaciones este verano, pero te resultará muy útil para las próximas. Dos de las cosas que nos resultan más tediosas de la vuelta de vacaciones son limpiar la casa y hacer la compra. Por eso, nuestro primer consejo es que dejes la casa limpia y ordenada y la ropa de cama cambiada antes de marcharte. Así, cuando volváis, encontraréis vuestro hogar mucho más acogedor y listo para descansar del viaje.
Y el segundo consejo es que dejes en la nevera lo necesario para al menos los dos o tres primeros días de vuelta a casa. En Andreu te lo ponemos fácil con nuestras bolsas termoselladas y de larga caducidad: solo tienes que elegir los productos que más te gusten y guardarlos en la nevera. Te estarán esperando para hacer más sencilla y sabrosa la vuelta. Nuestras conservas y mini chapatas serán el complemento perfecto.
Adelanta la vuelta un par de días
Es tentador intentar aprovechar cada segundo que puedas de un viaje, pero los psicólogos recomiendan no volver directamente a la rutina diaria sin haber pasado por unos días previos de transición y re-adaptación a la vida cotidiana, ya que volver directamente al trabajo elimina la sensación de felicidad que dejan en nosotros las vacaciones. El ajuste puede resultar especialmente difícil para los más pequeños si pasan de la libertad de las vacaciones a la necesidad de una rutina de estudio, alimentación y ocio.
Es por eso que los expertos recomiendan, sobre todo si hay niños pequeños, regresar uno o dos días antes de las vacaciones para que puedan habituarse. Recupera la rutina de sueño, de actividad y de alimentación poco a poco, permitiendo algunas licencias parecidas a lo que han vivido en vacaciones hasta que vuelvan al colegio.
Volver unos días antes también será bueno para ti, ya que podrás poner todo en orden en casa, responder correos electrónicos o hacer recados pendientes antes de que regresar al trabajo consuma buena parte de tu tiempo.
Crea un ambiente favorable para la vuelta
¿Cuántas veces nos decían cuando éramos pequeños cosas como “Aprovecha, que ya se acaba lo bueno” cuando se acercaba la vuelta al colegio? Presentar a los niños la vuelta a la rutina como algo que no les gustará solo contribuye a empeorar su ánimo y a que la adaptación sea complicada, sobre todo cuando son muy pequeños.
Es por eso que es buena idea preparar el terreno unos días antes de regresar de vacaciones y hablar con ellos de las cosas emocionantes que les esperan en casa: los abuelos u otros familiares, los amigos, sus juguetes y actividades favoritas… La perspectiva de diversión en casa les ayuda a calmar la decepción que sentirán por el final de las vacaciones. Eso sí, deben entender que la rutina es importante y que en casa se respetan las normas de casa.
Fomenta la nostalgia positiva
¿Quién no echa de menos las vacaciones durante las primeras semanas tras el regreso? Fomenta la nostalgia positiva con planes sencillos como volver a ver las fotos que hicisteis en las vacaciones, buscar un sitio especial para los recuerdos que hayáis traído (como conchas o piedras de la playa) o propón a los niños que escriban qué es lo que más les ha gustado y luego lo ponéis en común.
Una buena forma de quitarse la nostalgia es empezar a pensar los planes para las próximas vacaciones. No es necesario reservar ni comprar billetes: algo tan sencillo como proponer destinos o actividades que os gustaría hacer la próxima vez que tengáis unos días libres juntos es suficiente para mantener la ilusión de las vacaciones. Así lo hacen los grandes viajeros y aseguran que funciona.
Haz los tres ajustes clave para la vuelta al cole
Hay tres ajustes clave que es necesario hacer con los niños (y con nosotros mismos) cuando acaban las vacaciones: los horarios de sueño, las rutinas de alimentación y las de ocio. Si ya teníais una planificación antes de las vacaciones, recupérala poco a poco, desde que volvéis de vacaciones hasta que empiece el colegio.
Si no la tenéis, es un buen momento para empezarla. Recuerda que tener horarios constantes para irse a la cama y para levantarse ayuda, así como que los hábitos saludables de sueño establecen entre 9 y 11 horas para niños de 5 a 13 años y entre 8 y 10 horas para adolescentes entre 14 y 17 años. Incluye en su día a día algo de ejercicio (por ejemplo, un paseo) y vuelve a la dieta saludable (con algún capricho una o dos veces a la semana).
Esperamos que estos consejos os hagan más llevadera la vuelta de vacaciones. Para ponerle el sabor que tanto os gusta en casa, elige nuestros embutidos, jamón y salmón en bolsas termoselladas de larga caducidad, ideales para conservar en la nevera y tenerlas listas para comer a la vuelta. Y si te apetece algo caliente, consulta en Glovo nuestras opciones de delivery y te las llevamos a casa de lunes a sábado. La vuelta a la rutina, mejor con Andreu.
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